Fue justo en
unas vacaciones que tuvimos en la encantadora isla de Margarita donde ocurrió todo.
Ya teníamos tiempo planeando ese viaje junto a nuestros amigos Felipe y
Marielsy, quienes fueron los cómplices en todo esto.
Por circunstancias
del destino, entrando a “waterland” (parque de los delfines) Jorge recibe una trágica
llamada de que su abuelo paterno Sr. Simón Tovar había fallecido,
lastimosamente nos tuvimos que regresar con urgencia a Barquisimeto, y como
nuestro viaje lo hicimos por tierra, regresarnos de la misma manera nos sería
imposible llegar antes del sepelio del abuelo. Por esta razón tuvimos que
retornar por aire exactamente el día de mi cumpleaños el 25 de Enero.
Como tuvimos
que dejar el carro en la posada donde nos estuvimos quedando en Margarita,
debíamos regresar igualmente por aire para buscarlo. Desde aquí no conseguimos
boletos para el siguiente día sino para dos o tres después. Lo cierto fue que cuando
llegamos otra vez a la isla, decidimos quedarnos otros días más para poder
disfrutar un poco más del viaje que habíamos planeado. Nuestros amigos Felipe y
Marielsy se tuvieron que venir solos a Lara. Nuevamente estando
en la isla del amor, nos dispusimos a ir a nuestra playa favorita “El Yaque” (ubicada
a pocos metros del aeropuerto de Margarita). Guardamos el carro en el
estacionamiento, y mientras Jorge bajaba las cosas del carro, Karen se dispuso
a comprar varias Virgen del Valle que llevaría como regalo. Eso le dio oportunidad
a Jorge de seguir sus planes de la sorpresa del anillo, a todas estas, Karen ni
se imaginaba nada.
Luego de
disfrutar por un largo tiempo del bello paisaje, estando dentro del mar, Jorge
baja el vaso contigo (la cuña es solo para que se imaginen que el vaso era cerrado
con tapa y exterior oscuro) y no le daba de tomar a Karen, ella insistía e
insistía y nada. Hasta que Jorge le dice cierra los ojos, y Karen imaginándose todo
menos el anillo. Jorge saca el anillo en un estuche de un Volkswagen amarillo y
Karen impactada se ríe y espera las palabras mágicas y dice que siiiiii… Lo
demás es reservado.
Así fue como
un 31 de Enero de 2013 nos comprometimos bajo la luz del día y con la
inmensidad del mar de testigo. Felizmente Karen porta su anillo de compromiso
que luego de 10 años obtuvo y luego de 3 años más lo acompañará con un anillo
de alianza de matrimonio.
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